Cae el sol sobre el castillo, / castillo de sobras, viejo, / y en almenas y troneras / vuelan vencejos y versos. / Las piedras sueñan caídas / en las glorias de otros tiempos, / sueñan en damas y arqueros, / sueñan feroces guerreros, / en poetas y juglares, / fiestas para caballeros.
Palacios de la Valduerna / fue lugar de veraneo / de las guerras medievales / y de los grandes torneos. / Palacios de la Valduerna / fue un vergel para los sueños: / reyes y reinas llegaron / al poblado palaciego / a pescar peces en ‘Peces’ / y a cazar en halconeo, / por ver de olvidar batallas / contra locos sarracenos / y conciliar discusiones / cubiertas de siete velos.
¡Ay torre del homenaje! / ¡Ay patio de armas, armero / hoy convertido en jardín / para versos y vencejos! ¡Ay muralla de troneras / a las puertas del desecho, / donde las sombras se estrellan / con historias y con sueños! / Hoy es fiesta en la Valduerna / de este rincón palaciego, / donde los poetas cantan / mirando sin ver el cielo.
Y vuelan, vuelan canciones, / y vuelan versos y vencejos / en una tarde de agosto / de aplausos para los vientos. / Suenan guitarras y cantos, / suenan otros instrumentos, / que acompañan a poetas / y a entusiasmos desde suelo.
Y un premio rasga la tarde, / tarde de estío agosteño, / para un poema agraciado / en un certamen señero; / el premio ‘Conrado Blanco’ / es también de los vencejos, / casi gemelos nacieron / buscando a poetas nuevos.
Y llegan gentes de casa, / llegan también forasteros, / al jardín de los Bazán, / do se celebra el encuentro. / Poetisas y poetas / declaman poemas, versos / al borde de un torreón / que huele a mil tropos viejos. / ¡Ay castillo de los Bazán, / un refugio veraniego / para príncipes y reyes / o caballeros guerreros! / ¡Ay torre del homenaje, / cien acosos a lo lejos, / la casa de Don Felipe, / el último Palaciego!
Que canten ya los poetas / sus trabajos hacia el cielo. / Que los músicos entonen / pentagramas cancioneros. / Que el bueno de Don Conrado / entregue su premio eterno. / Que resistan las troneras / y las almenas el tiempo. / Que hoy es fiesta en la Valduerna, / adorando allá a lo lejos / un monte santo, sagrado, / llamado monte Teleno.
Cae el sol sobre el castillo, / castillo de sobras, viejo, / y en almenas y troneras / vuelan vencejos y versos.