Las azucareras de la zona norte han recibido esta campaña, que está a punto de finalizar, un total de 1,9 millones de toneladas de remolacha. No obstante, las continuas lluvias de los últimos meses han impedido arrancar 150.000 toneladas por lo que la producción total superará ligeramente los dos millones de toneladas. Esta situación obligará a reabrir la planta de La Bañeza a mediados de febrero, según informaron fuentes de Asaja.
En ese sentido, la organización explicó que hoy es el último día de recepción de remolacha de esta campaña en la azucarera de Toro (Zamora). Además, el próximo martes, 28 de enero, cerrará sus puertas la de Miranda de Ebro (Burgos), sumándose estas dos factorías de Azucarera Iberia a la planta de Acor en Olmedo (Valladolid), que finalizó las entregas el pasado 8 de enero.
Asimismo, Asaja explicó que a partir de la próxima semana ninguna azucarera se encontrará abierta en Castilla y León, hasta que a mediados de febrero reabra sus puertas la de La Bañeza. Esta campaña las lluvias retrasaron casi dos meses la siembra y las heladas del otoño impidieron al tubérculo lograr el peso habitual, debido a que las bajas temperaturas paralizaron su desarrollo. Por ello, el nivel de riqueza, “sin ser récord”, ha alcanzado “buenas marchas”.
Finalmente, la organización agraria recordó que esta campaña es la última antes de que se inicie la liberalización del marco regulatorio del azúcar. “Es imprescindible que haya unas condiciones de precio de remolacha que, junto con las ayudas que permanecerán en vigor, aseguren una buena rentabilidad al cultivo”, concluyó Asaja.
Entrada de la Azucarera por su acceso principal.
