La Guardia Civil de León ha dado por esclarecidos cuatro casos de agresión sexual en la provincia, además de otro en Valladolid, ocurridos desde hace dos décadas y que parecían no tener resultados. Tras la recepción de pruebas incriminatorias en dos juzgados de León, otro vallisoletano y en el de La Bañeza, los indicios apuntan a un gallego de 53 años, A.L.L, como presunto autor de cuatro violaciones, además de un “intento frustrado”, en la zona del Órbigo, en las comarcas de La Bañeza y el Páramo y en Mayorga (Valladolid).
La reapertura de los cinco casos se produjo tras ser detenido por la Benemérita en julio de 2010 como presunto violador de otra anciana de 80 años en la comarca orensana de Valdeorras, momento desde el que permanece en prisión preventiva acusado de haber agredido sexualmente a varias víctimas que tenían entre 65 y 85 años.
Tras conocer el modus operandi del presunto violador en serie, la Guardia Civil de León vio posibles similitudes con casos sin resolver que databan desde 1993 hasta 2007. Entonces fue imposible de identificar el supuesto violador porque se cubría con sombrero y gafas, lo que impedía dibujar un retrato robot preciso, al tiempo que nunca se logró reconocer el vehículo o su matrícula.
Al parecer, tampoco había testigos, hasta julio de 2010 cuando los gritos de la última víctima alertaron a los vecinos, que lograron anotar la matrícula del vehículo y avisar a la Guardia Civil. Entonces se produjo su captura cerca de Quiroga (Lugo), donde tenía su domicilio, a pesar de que regentaba un céntrico negocio de lavado y venta de vehículos usados en Ponferrada desde hacía años.
A.L.L. está a la espera de juicio en Orense por el caso de hace medio año, cuando fue detenido, pero niega que existiera violación y alega que fue una relación sexual consentida, igual que niega el resto de los casos. Mientras, los juzgados instruyen ya las causas por cinco presuntos casos de agresión sexual –cuatro consumados y uno frustrado– y física.
