En la sesión de la Lonja Agropecuaria de León ha empezado a pesar ya mucho el cierre de restaurantes, bares y comedores dando como resultado una sesión bajista. Los lechazos y cabritos han cotizado a 2,70 euros/kilo y 2,50 euros/kilo respectivamente, lo que supone 30 euros la unidad y un reflejo de que el consumo no es una cuestión de precios, si no que es una cuestión de hábitos.
En cuanto a la carne de vacuno, el consumo se ha ralentizado, sobre todo en las piezas de mayor valor añadido (chuletón, solomillo,…) que como pasa con los cabritos y lechazos son los demandados en la hostelería.
La patata ha quedado ya sin cotización, puesto que no se están haciendo operaciones. La que queda por vender, no sólo en León sino en toda Castilla y León, a fecha de hoy no tiene venta, puesto que es una patata que no estaba destinada a lineales de supermercados sino como pasa con la carne su destino por tamaño y forma, aunque sea de gran calidad iba también destinada a restauración.
En cuanto al cereal, estas últimas lluvias han pesado sobre todo en la cotización de la cebada, puesto que si a partir de ahora el tiempo sigue acompañando, puede darse una buena cosecha.