Después del desastre de público con el que arrancó la temporada de la Red de Teatros de Castilla y León el pasado fin de semana, un número de bañezanos más significativo ha arropado este sábado, 26 de abril, a nuestro paisano Crispín d’Olot en su vuelta al Teatro Municipal con ‘La desesperación’, la segunda parte del espectáculo ‘Versos y Bardos’ con el que ha recorrido numerosas salas y que ya tuvo su puesta de largo en La Bañeza en el verano de 2011 con el popular ‘Mester traigo fermoso’.
‘Versos y Bardos’ es un viaje a través de la literatura en lengua castellana acompañado del sonido de varios instrumentos singulares como pueden ser dos cucharas de madera o un almirez, entre otros muchos enseres, donde el juglar bañezano es capaz de estar más de hora y media dejando su inconfundible sello personal en todos y cada uno de los versos y canciones que forman parte del repertorio del espectáculo.
Yo también fuí, lloré y me reí mil veces. Crispin es un fenómeno, un artistazo, un genio y con una memoria de envidiar.
Me emocioné mucho con los relatos: «del niño que ganaba un duro al año», «de la niña que había fallecido» y también con la última canción «Oda a La Bañeza» que acompañaron a Crispin,su padre Manolo con su inseparable armónica y Mendoza con el cajón.
Una noche inolvidable.
Estoy de acuerdo,pero las actuaciones buenas hay que pagarlas,y si quieres cosas baratas a 3 euros ya sabes lo que vas a ver es del montón ,quiero decir con esto que como todo hay que pagarlo,y yo creo que desde el ayuntamiento se trae de todos los géneros y precios pero cada uno elige si va o no va,no vamos a echar culpas a quien no las tiene.
Es cierto, yo fuí testigo de la poca gente que había para ser Crispín, siendo como es un fenómeno y único y de La Bañeza había poca gente. Ellos se lo perdieron, porque a mi me encantó.
Suelo ir a nuestro Teatro muchas veces porque me gusta, pero el espectáculo del otro día, del baile flamenco fue un desastre de público. Igual en el ayuntamiento deberían tener más cuidado a la hora de programár y no poner actuaciones a la ligera que pueden acabar siendo un problema y cuestan mucho dinero y ya ha habido demasiados resbalones.