Comienza la campaña de recogida de remolacha en el norte de España con la apertura de la fábrica azucarera de Toro (Zamora), la primera en abrir en Castilla y León. Azucarera continúa dando el mejor servicio a sus agricultores planificando los arranques teniendo en cuenta sus preferencias y la evolución del contenido de sacarosa de la raíz, de manera que la entrega se produzca cuando ésta se encuentre en estado óptimo, para garantizarle una mayor rentabilidad. De este modo, los agricultores de Azucarera podrán comenzar a entregar la remolacha en la fábrica de Toro hasta finales de diciembre y a partir de ese momento, lo podrán hacer en La Bañeza (León), siempre sin coste para el agricultor.
Se pone a disposición de los remolacheros, de esta manera, una única fábrica, pero con dos centros de recepción: Toro y La Bañeza, lo que permite a los agricultores contar con una extensa campaña de arranque para que decidan cuándo quieren arrancar la remolacha y dónde quieren entregarla.
Azucarera ha incrementado esta campaña un 70% la superficie de remolacha sembrada en el norte, superando así las 17.000 hectáreas, de las que más del 83% corresponden a agricultores socios de Agroteo. En la zona de Toro (Zamora), la superficie de remolacha se ha incrementado un 75% alcanzando las 6.300 hectáreas, destacando la provincia de Salamanca, con un crecimiento porcentual de un 162%, pasando así de 842 hectáreas contratadas la pasada campaña a las 2.211 hectáreas contratadas con Azucarera en la campaña actual.
En cuanto a superficie sembrada de remolacha, la zona de influencia de la fábrica de La Bañeza es la que mayor crecimiento ha registrado con más de 7.500 sembradas, lo que supone un incremento del 85% respecto a la campaña pasada, en la provincia de León, ha sido la que mayor crecimiento ha experimentado debido a que los agricultores leoneses han vuelto a apostar por la remolacha como uno de los cultivos más rentables, seguros y cómodos.
Crecimiento del cultivo
Es destacable el crecimiento del cultivo en nuevas zonas de riego modernizado de influencia para las fábricas de Toro y La Bañeza, como Villalón de Campos en la provincia de Valladolid, Payuelos en la provincia de León, o Río Lobos en la provincia de Salamanca, con la incorporación de nuevos agricultores al cultivo, lo que hace más sostenible la base de agricultores de Azucarera, que sigue creciendo y renovándose.
En la zona de Miranda de Ebro (Burgos), el crecimiento ha sido de un 45%, con 3.200 hectáreas. Cabe destacar el incremento experimentado por Huesca, donde la superficie de remolacha ha aumentado un 60%, superando las 400 hectáreas. Tras el éxito de la campaña pasada, los agricultores de la zona de Monzón han vuelto a apostar por este cultivo que se transporta por ferrocarril hasta la fábrica de Miranda de Ebro, sin que ello suponga incremento alguno de la huella de carbono del transporte en largas distancias.
Se confirma, por tanto, que este año es el año de la remolacha, y que la apuesta de Azucarera por presentar una oferta variada de contratos y de servicios, que dé a los agricultores la rentabilidad, seguridad y comodidad que necesitan, es una apuesta de éxito con mucho futuro.
La rentabilidad, la diversidad de los servicios a los agricultores, así como la seguridad y el asesoramiento para mejorar el cultivo, sitúan a Azucarera como la compañía preferida para sembrar remolacha. «Somos una empresa que quiere mejorar cada año, tratando de dar siempre el mejor servicio a nuestros agricultores. Seguimos trabajando para incorporar la mejor tecnología aplicada a la remolacha y los mejores servicios adaptados a las necesidades de cada uno de nuestros agricultores. Tenemos el mejor equipo de profesionales al servicio del campo, y este año se ha notado especialmente la gran labor que estamos haciendo gracias a la alta rentabilidad del cultivo frente a otras alternativas, que combinada con la seguridad y la comodidad que ofrecemos, es una apuesta imbatible», explica la directora Agrícola, Salomé Santos.
Estimaciones en Toro
Según los resultados obtenidos en las últimas muestras realizadas, se espera una campaña con medias de 100 toneladas tipo por hectárea y un nivel de sacarosa de 17 grados de polarización. La campaña, que ha empezado ayer, será más larga de lo habitual y durará en torno a 100 días.
Según la responsable agrícola de Toro, Isabel Boronat, la campaña remolachera en esta zona podría calificarse como «notable» debido a que «se ha podido sembrar en tiempo y forma», con una climatología estival que ha sido más suave que el año anterior. «Las abundantes precipitaciones registradas a primeros de septiembre han dado un buen empujón al cultivo, especialmente en aquellas zonas donde el agua empezaba a escasear», señala Boronat.
A la fábrica de la chichimenea le queda telediario y medio y la comedia de deespués. Habrá que disfrutar de los últimos azucarillos autóctonos a la hora británica del té. Me lo dijo la reina Elisabeth haciendo la ouija en las casas de los trabajadores de antes, que tienen las persianas de ladrillo.