El año 2022, la Lonja Agropecuaria de León cerró las cotizaciones de los cereales con unos precios cercanos a un 30% superiores al cierre de 2023, salvo la avena. Así el trigo cotizaba a 310 euros tonelada y en la actualidad está a 229 euros tonelada, la cebada de 294 ha pasado a 213, el triticale de 295 euros/tonelada a 219, el centeno de 285 a 202, la avena de 291 a 258 y el maíz de 310 euros/tonelada a 225.
En mucha menor medida han bajado los insumos que el agricultor debe comprar para realizar las siembras, y por tanto la caída de la rentabilidad es aún mucho más acusada de lo que en realidad se puede percibir. Tampoco está claro que a estos precios los cereales hayan tocado suelo si bien las caídas, de producirse, serán menos pronunciadas o incluso podría ocurrir que hubiese un repunte en el precio de los mismos.
Además, según se observa desde la lonja leonesa, el año 2023 ha sido un año de producciones nefastas, con una sequía que arrasó los cultivos, y por tanto la moral del agricultor está por los suelos.
En el sector del vacuno, subida de 40 euros en unidad de los pasteros macho y bajada de los lechazos y cabritos en 0,60 euros el kilo vivo. Por lo demás, repetición de precios en el resto de los productos como el caso de alubias, patatas girasol o forrajes.
Fotografía de archivo de una cosechadora en un campo de cereales.
