El Moto Club Bañezano y el Ayuntamiento de La Bañeza han acordado suspender la celebración del tradicional Gran Premio de Velocidad en la semana de las fiestas patronales de agosto, pero ya se han puesto a trabajar para intentar organizar antes de noviembre una carrera de motos con menos pilotos y categorías, restricciones de público y aforos y medidas de seguridad anti-covid para que este 2021 “sirva de puente entre la suspensión del año pasado y la vuelta a la normalidad que esperamos en 2022″.
Son palabras de José Javier Morla, presidente del Moto Club Bañezano, quien junto al alcalde de La Bañeza, Javier Carrera, explicaron algunas de las decisiones tomadas en las distintas reuniones mantenidas a lo largo de las últimas semanas entre los representantes de ambas entidades, todo para conseguir “que la ciudad no pierda su afición al motor y que la comarca pueda aprovechar el recurso económico que supone la carrera”.
Esta idea de conjugar “salud y economía” organizando pequeños eventos o actividades pero con garantías sanitarias es la defendida por Carrera ya durante el pasado verano y es la que se persigue en esta ocasión, aunque “siempre pendientes de las medidas sanitarias superiores y de las autorizaciones oportunas”, remarcó el regidor.
Morla explicó que la intención del Moto Club es “trabajar sin descanso para conseguir que este año haya carrera, no como la conocimos hasta 2019, pero sí un evento que sirva de prólogo a la normalidad; no se puede acelerar de 0 a 100 en un año sino que hay que dar pequeños pasos”, al tiempo que Carrera apeló a que “la situación pandémica actual y los niveles de vacunación nos indican que en verano vamos a estar mejor que ahora y de ahí en adelante recuperaremos la vida normal, pero hay que ser muy cautos”.
La intención del consistorio y el Moto Club es que entre septiembre y octubre, siempre antes del fin de semana del cambio de hora por los inconvenientes que el ocaso causa en la prueba, haya una carrera de motos aunque se reduzcan considerablemente las cifras de las últimas ediciones de un premio que juntaba en la ciudad a 60.000 aficionados, aforos que en este 2021 “son impensables”.
No obstante, aunque se suspende el Gran Premio de Velocidad de agosto, durante el primer fin de semana de las fiestas patronales –del 6 al 8– sí que está previsto que se celebre alguna actividad relacionada con el mundo del motor para que no se pierda la que es una de las señas identificativas de La Bañeza. Eso sí, siempre pendientes de la situación sanitaria del momento.
Imagen de archivo de la última carrera celebrada en La Bañeza.
Las motos en octubre?
Pero si en el 2016 las motos fueron el ultimo fin de agosto y era muy tarde y se hacia de noche muy pronto.
Entonces el tiempo ha dado la razon al ayto. Y el enfado del motoclub fue una Pataleta de niño pequeño.
Experimentos con gaseosa.
Las motos si no se pueden hacer en agosto ya vendrán mas agostos y ahorrar el dinero para hacerlas bien en el 2022.