Pieza de la familia Carvajal - Cavero.
Es un hecho consumado: el alcalde de La Bañeza, Javier Carrera, y su equipo de gobierno han conseguido que se cierre del Museo de las Alhajas en la Vía de la Plata, un museo de joyería e indumentaria tradicional único en España y uno de los principales atractivos de la ciudad desde el año 2011. La familia Carvajal-Cavero ha anunciado este miércoles su decisión “irrevocable” de vender la colección formada por cientos de piezas tras la resolución de extinción de los convenios dictada por el alcalde de La Bañeza.
“La familia propietaria de todas las colecciones que conforman los fondos materiales del Museo de las Alhajas en la Vía de la Plata, tras la resolución de extinción de los convenios dictada por el alcalde de La Bañeza, lamenta encontrarse en la necesidad de comunicar públicamente y de modo irrevocable la intención de vender íntegramente está colección: la joyería popular e histórica renacentista que ha dado fama al Museo”, señalan en una nota donde se recuerda que los fondos están formados por textiles etnográficos, collares, collaradas, azabaches antiguos, fotos, recordatorios de comunión, de boda, de bautizo, los utensilios de la fábrica de curtidos, de lino, la colección de mantas y cobertores del Val, sellos de pan y otros útiles de madera como la extensa colección de castañuelas.
La familia Carvajal-Cavero, “consciente del carácter inabordable de la colección, con numerosísimas piezas de joyería leonesa y de la Vía de la Plata o del Reino de León, de la mayor antigüedad y calidad, aún totalmente desconocidas para los expertos y para el público generalista”, destaca también que entre los fondos se encuentran “aperos de labranza o la mejor y más antigua colección de cerámica de barro de Jiménez de Jamuz, bordados, paños de ofrenda, mantones de manila y un largo etcétera”.
“Estamos muy agradecidos por el gran honor que ha supuesto la distinción de poder representar a los bañezanos en el arte popular, pero todo comienzo tiene un final. Es una decisión muy difícil. La idea original era lanzar el Museo para que la sede esté en nuestra ciudad y se impliquen varias administración públicas. Está idea se estaba desarrollando para conseguir llegar al año 2029, junto a terceras personas públicas y privadas capaces que continuar la tarea. Lamentamos decir que ha sido imposible. A partir de ahora nos dedicaremos a recoger y vender nuestra colección, no sin antes agradecer la distinción que nos han otorgado nuestros convecinos con su apoyo”, concluyen.
Como ya hace años dije que en La Bañeza,referido a museos,ya sólo faltaba el de la alpargata de esparto vieja, no puedo más que alegrarme por la desaparición de algo que cuesta mucho dinero a los ciudadanos y no sirve para nada más que para mantener a algún parásito. Otros tienen otra opinión. Es la riqueza de la diversidad.
Esto de cerrar el Museo de las Alhajas, es toda una INFAMIA, además de CANALLADA y VENGANZA hacia la Señora Cavero, que tanta ilusión y trabajo realizó para su puesta en marcha. Nade tiene la más remota idea del muchísimo trabajo y ahora del muchísimo daño que se hace a LA BAÑEZA.
Los museos, exposiciones, casas de la poesía, escuelas de música, etc, no se hacen como negocios para ganar dinero. Forman parte del patrimonio cultural de las ciudades. Y deben estar incluidos en los presupuestos generales estatales, autonómicos o municipales. Por lo que una vez aprobados y creados hay que mantenerlos. Otra cosa distinta es la creación de empleo con iniciativas empresariales y la atracción de empresas que puedan crear puestos de trabajo. Como por ejemplo dar vida al polígono industrial, cosa que no está haciendo en absoluto.
Creo que se debería convocar una manifestación en La Bañeza frente al Ayuntamiento para protestar por el cierre del Museo. El tema es lo suficientemente grave como para justificarla.
Seamos serios. Tanto el denominado museo de las alhajas, como el museo de la harinera y como la futura casa de la poesía no son más que auténticas chorradas, que ni atraen gente ni tienen la menor relevancia a ningún nivel. Cosa distinta es que las escasas personas que se acercan a La Bañeza, una vez que están aquí, por el motivo que sea, se pregunten qué hay que ver en la ciudad y se acerquen a estos lugares a darse un garbeo. Eso sí, en su momento, sirvieron para darle salida a un edificio en el que había existido una fábrica de harinas, ya totalmente inservible, y quitarle un auténtico muerto a sus propietarios, a costa de una gran inversión por parte del Ayuntamiento en su reparación y rehabilitación, que pagaron todos los ciudadanos sin beneficio alguno para la ciudad. Lo de las alhajas, más de lo mismo. Unas personas espabiladas aprovecharon la sintonía política del momento para hacer un gran negocio, imponiendo unas condiciones totalmente irrisorias como decir qué persona tenía que ser el director y las cantidades a cobrar por éste. Si hacen cuenta del dinero pagado por el Ayuntamiento durante todo este tiempo y del beneficio obtenido por la existencia de dicho museo verán lo ruinoso del mismo. Y ello, por mucho que se empeñen en dar publicidad de lo magníficas que eran las piezas expuestas, que salvo para cuatro entendidos, no dejaban de ser otra cosa que unos meros “cachivaches”. Por tanto, si se cierra, no se pierde nada y seguramente se ahorran ingentes cantidades de dinero absolutamente desperdiciadas. Lo de la casa de la poesía es otro desbarre más. Quien se cree que en la época actual vaya a venir gente a ver unos libros que carecen absolutamente de la mínima importancia para el común de los mortales. Eso sí servirá para saciar la vanidad de algunas personas y para justificar que en La Bañeza se ha hecho algo. Pero todas estas estupideces no van a traer empleo para los ciudadanos y poco a poco el número de habitantes irá cayendo, los locales de la calles seguirán vacíos, la juventud se irá porque aquí no hay futuro y La Bañeza será una residencia de ancianos. Pero mientras tanto, sigan con las harinas, las alhajas, las indumentarias y sobre todo con la poesía, pues no cabe duda que esta ciudad se está convirtiendo en un auténtico poema.
Hacer las cosas bien siempre es difícil y dialogar dos, cuando uno no quiere, es imposible. Las cosas bien hechas, bien están. Adelante!
Es penoso que en un pueblo que está deprimido, el Ayuntamiento fulmine una de las pocas cosas interesantes que tiene. Y muy triste también que haya gente que se alegre. ¡Animo!, ahora a por el teatro. Y con un poco de ganas y empeño, a por la azucarera.
Es muy triste que se cierre un Museo con tanto encanto. Lamento mucho que el Ayuntamiento se lo cargue.Pero todavía es más lamentable que haya gente que se alegre.
Profunda tristeza por el cierre del Museo de Las Alhajas.Trabaje el año pasado con Olga y su hijo Julio,y las considero personas maravillosas.Involucradas con su proyecto que era tambien de La Bañeza y su comarca.Siempre dando el maximo con los grupos de visitantes que se recibian.Asesorando con una labor didactica y cariñosa sin excepcion.Y ahora resulta que un individuo,echa por tierra todo este proyecto de años.
Mal trabajo,poca conversacion y poco preocuparse por la Ciudad .
Las llamas del infierno seran poca cosa para acojer a este individuo.-
Una pena que se pierda uno de las atraiciones turísticas que atrae gente a la Bañeza, así el único movimiento que vamos tener en la bañeza en las calles, es del tanatorio al cementerio,eso si pasando por la plaza que hay que darle uso.
Salió el PP
Se le acabo el chollazo a la lista de Olga y familia
Y ahora la culpa del alcalde que simplemente quería regularizar la situación
Menudos Jetas
Imposible. Dijo el ciudadano Carrera que era todo un invento y que se iba a solucionar. Esto debe ser una confusión u otro invento de los que quieren hundirlo.
O tal vez puede ser que sea el principio del fin, porque yo tengo claro que seguirá siendo alcalde, pero también que va a acabar con lo poco que tenemos.
Esto es solo el empezar, no se puede ser más torpe.
Ahora ya pueden abrir la Casa de la Poesía que seguro que hace que lleguen autobuses de gente venida desde todos los rincones de España y llenará nuestra ciudad y por supuesto destinar el dinero de las Alhajas a contratar el personal “necesario” para ello, que se lo ha ganado a pulso.
¡¡¡Gracias Sr. Carrera!!! La Bañeza no le olvidará. Y no le olvidará no por ser un buen gestor, sino por ser el primer edil que en 8 meses ha conseguido todo un record de ineficacia. Andese con cuidado no vaya a ser que sus socios de la capital le pongan un buen correctivo. Piense que aunque no estén Vds. instalados en el ayuntamiento, esto ya no va a tener marcha atrás. ¡Mal servicio ha hecho en tan poco tiempo!