La Comunidad de Regantes de la Presa Vega de Abajo no llevará a cabo la modernización de los regadíos de su zona, tras haber ganado por mayoría el ‘no’ a este proyecto que lleva años sobre la mesa. Este domingo los miembros de la comunidad tenían una cita con las urnas en la sede de Vecilla de la Vega y el resultado ha sido 317 votos en contra y 279 a favor de plan de modernización de los sistemas de regadío, cinco en blanco y seis nulos según los datos del escrutinio a los que ha tenido acceso Ibañeza.es.
Los regantes de la Presa de la Vega de Abajo han optado por no seguir la tendencia de las comunidades de regantes de Llamas de la Ribera, Canal Alto de Villares, Presa La Tierra, el Salvador, Canal de Villadangos, Canal de Castañón Canal del Páramo Alto y Presa Cerrajera, que sí optaron por modernizar el sistema.
Como se recordará, atrás quedan tres reuniones informativas: la primera en la sede de la Comunidad en Vecilla con regantes, la segunda en San Román el Antiguo para los pueblos de San Cristóbal y la tercera en Soto de la Vega para las localidades de dicho municipio, en las que se ha informado a todos los afectados de todo el contenido de este proceso.
Además, recientemente los ayuntamientos de Soto de la Vega y San Cristóbal de la Polantera aprobaron el proceso de reconcentración parcelaria que posteriormente han solicitado a la Junta de Castilla y León, para que este domingo se celebrara en Vecilla de la Vega una Junta General Extraordinaria conducente a la votación sobre si se moderniza o no el sistema de riego de la Comunidad de Regantes, ganando finalmente el no.
“Todo cuesta arriba”
Desde la comunidad se asegura que “el relevo generacional, ya difícil en el campo, se pone cuesta arriba en esta parte de la Vega del Órbigo, mientras la mayoría de nuestros vecinos dicen sí a la modernización”. La corriente a favor que se había generado tras la última sequía, “en la que todas las comunidades que han celebrado votación para este fin han dicho sí al cambio, no ha llegado a la Vega de Abajo, por lo que sus agricultores tendrán que seguir utilizando la pala y la azada, así como las motobombas individuales de gasóleo para los cultivos de aspersión y perdiendo agua en abundancia por una redes de acequias de 40 años de antigüedad que van camino de la ruina”.
No obstante, la Comunidad de Regantes volverá a intentarlo en un corto espacio de tiempo, “con el fin de facilitar la incorporación de nuevos activos al campo y poder frenar en la medida de lo posible la despoblación que nos asola, que ya se está convirtiendo en un mal endémico en nuestra zona”.
Es una mala noticia que esta vega de una calidad de suelo única en la zona, con un proyecto de concentración parcelaria encima de la mesa quede así la votación. Sin la modernización simplemente se perderá esa zona para el regadío, que es para lo que vale y así lleva miles de años, pero ha llegado la hora de la modernización o la nada.