publicidad PUBLICIDAD

publicidad publicidad publicidad publicidad
publicidad

Modos

● Ibañeza.es ►Sábado, 4 de abril de 2015 a las 8:57 Comentarios desactivados


La gente suele confundir la mala educación con la ineducación. La diferencia es que en la primera se supone que tienes aunque hagas caso omiso de ella y la segunda es que ni te suena de lo que va. A veces hago honor a los esfuerzos que hicieron conmigo y que no siempre demuestro, así que mi vanidad y yo agradecemos y mucho los comentarios que suscitan estas letras, bien es verdad que no siempre de manera directa y que yo agradezco, aún, más. Ya teneis aquí otra “partitura que, como siempre, está escrita en clave de mi”.

La anterior pieza trataba de algo similar: confesaba que me gustaba la Navidad, si bien desprovista de tanto brillo y purpurina. Con la Semana Santa me ocurre lo mismo. Todo lo que pienso, por lo menos del aspecto visible resulta poco agradable a muchos oídos de papones lígrimos. Repito, es lo que me parece a mí y no pretendo que todo el mundo piense lo mismo.

En el estupendo Pregón de este año, mientras se iban desgranando las vivencias de un “Hermano de Jesús” se resaltaban los cambios sustanciales que había experimentado la Semana Santa de L.B. Es verdad, mucho, pero a mí me gustaba más aquella otra menos grandilocuente.

Cuánto daño se le ha hecho a nuestra imaginería, que no tiene nada que envidiar a ninguna otra (bueno, a veces mucho, tampoco nos vamos a dejar llevar por un bañezanismo integrista) Me gustaban los santos antes de ser nuevos ricos, el “citius, altius, fortius” llevado a la religión, sólo indica una apariencia con poco contenido dentro. Es como aquello sobre la elegancia que empieza con “el rico se decora”, pero, en fin, dejemos que la tierra sea leve con los extintos y que los vivos aprendan de las lecciones ciertas que son las que nos dan los muertos.

También voy a meter el dedo en el otro ojo: hasta hace muy pocos días tenía cierto sentimiento de culpa por no salir en las procesiones pujando un santo. Pues bien, ese sentimiento ha desaparecido por completo: ¡claro que colaboro y participo con Jesús! lo hago cuando no están los que sólo hacen “gimnasia sacra” una semana (incompleta) al año. Lo hago con otros que son los que sienten que la Semana Santa rememora algo de una gran trascendencia para la vida de los hombres, lo hacemos cuando acudimos a actos religiosos que se programan por tradición y en los que faltan muchos “hombros”, así que Jesús, lamentablemente sigue tan sólo como cuando pendía de la cruz.

Tampoco es que quiera hacer sangre (más) pero lamento decir que guste o no guste la Semana Santa es algo religioso, es algo profundamente religioso, así que cuando se puja lo que se está haciendo es llevar sobre los hombros al Hijo de Dios.

publicidad publicidad

No se admiten comentarios.


publicidad publicidad

publicidad publicidad

publicidad publicidad


publicidad publicidad


publicidad


publicidad

    publicidad PUBLICIDAD


    publicidad publicidad publicidad


    |Ibañeza.es | el periódico digital de La Bañeza y comarca | © 2010-2024 | AVISO LEGAL

    Ibañeza.es