El cuartel de La Bañeza ha sido reformado en diversas ocasiones.
Los agentes del puesto principal de la Guardia Civil en la ciudad pronto dirán adiós al edificio destinado a cuartel, un viejo inmueble situado en el centro y que durante décadas ha dado servicio a la demarcación bañezana.
Las demandas de construir unas nuevas instalaciones para la Benemérita se remontan a hace más de veinticinco años, al evidenciar la importancia de contar con mayor espacio para los agentes y la necesidad de aumentar el número de efectivos. Sin embargo, el impulso definitivo al proyecto no llegó hasta octubre del 2005, en una entrevista mantenida entre el alcalde de La Bañeza, José Miguel Palazuelo, y el entonces Ministro del Interior, el leonés José Antonio Alonso, a fin de abordar los inconvenientes que padecía la treintena de agentes de la Guardia Civil que daban servicio en la ciudad.
De aquella reunión surgió el compromiso entre ambas instituciones para llevar adelante la construcción de un nuevo cuartel y el establecimiento como ‘puesto principal’ de la instalación bañezana, con el consecuente aumento del número de efectivos. Entonces se acordó la cesión de los terrenos por parte del consistorio, situados en una parcela de 5.000 metros cuadrados en la zona comercial de Eroski.
En ese momento, con un proyecto redactado por la oficina municipal de obras, se apuntó que los trabajos comenzarían en el 2008 y, tras 18 meses de trabajos, entre el 2009 y el 2010 la Benemérita ocuparía el nuevo edificio. Sin embargo, el olvido dejó el proyecto arrinconado salvo alguna visita del delegado del Gobierno en Castilla y León, Miguel Alejo, además de los mandos de la zona y de la comandancia a los terrenos donde se construiría el edificio.
En la actualidad, según acordaron autoridades locales y del Ministerio, los agentes no tendrán que trasladarse a la zona de la N-VI tras la construcción del nuevo cuartel y mantendrán su ubicación en el edificio situado en la calle Antonio Palau, esquina con Labradores, a excepción del periodo en el que se desarrollen los trabajos de demolición del actual y la adecuación de las nuevas instalaciones. Desde el consistorio no se dieron plazos definitivos, pero desde el equipo de Gobierno se espera iniciar las obras a lo largo del próximo año, con el fin de inaugurar el nuevo edificio en el año 2014.
El alcalde, José Miguel Palazuelo, apuntó que finalmente se ha optado por mantener al cuerpo de seguridad en una zona más céntrica que periférica por las ventajas que supone tanto para los agentes como para los ciudadanos, y reducir el espacio destinado a vivienda en beneficio del dedicado a servicios. En este sentido, el regidor señaló que se ha comprobado en otros destacamentos que la mayoría de los agentes optan por vivir fuera del cuartel, lo que provoca el deterioro de las viviendas vacías.
