El berciano Gerardo Álvarez Courel comenzó hoy su mandato como presidente de la Diputación de León con el anuncio de que el diálogo será su lema durante los próximos cuatro años. Transparencia, accesibilidad, eficacia, sostenibilidad e igualdad, dijo, serán los pilares de una etapa en la que, remarcó, todas las acciones tendrán como objetivo la lucha contra la despoblación.
Comenzó su intervención con emocionadas palabras de agradecimiento a su antecesor, Eduardo Morán: “Has vuelto a demostrar que tu generosidad no tiene límite, con un gesto que nunca podemos ni debemos olvidar”, dijo en alusión a su renuncia a ser candidato tras el veto de la Unión del Pueblo Leonés. El expresidente recibió con lágrimas los elogios de su compañero de partido.
Álvarez Courel se comprometió a trabajar de forma “incansable” para afrontar “una tarea colosal” que asume “con una ilusión a la altura de la gran responsabilidad que exige el desempeño del cargo” y reclamó “unidad, diálogo y cooperación para superar los desafíos”. También pidió al resto de la corporación “aparcar las diferencias para dedicarnos a lo que de verdad importa, la provincia”.
Reforzar el Servicio de Asistencia a Municipios y el de extinción de incendios “como hacen otras comunidades autónomas”, mejorar la conectividad y potenciar la marca Productos de León son algunas de las cuestiones que quiso destacar en su primera intervención como presidente al tiempo que reclamó a la sociedad leonesa “que actúe de forma activa en todo lo relativo a lo público, que es algo que no puede quedar solo en manos de los políticos”. “Prometo escuchar vuestras preocupaciones, ideas y aspiraciones. Juntos podemos sacar nuestra tierra adelante. ¡Viva León!”, concluyó.
El nuevo presidente recibió en la votación el apoyo unánime de sus compañeros de partido y el de UPL y en el PP, a pesar de los enfrentamientos internos por la elección de diputados provinciales, todos los representantes apoyaron la candidatura de Raúl Valcarce, mientras el diputado de Vox. Fernando Prieto Olite, se votó a sí mismo.
Los tres diputados leonesistas, que prometieron o juraron el cargo “por la autonomía de la Región Leonesa”, ocupan desde hoy la vicepresidencia primera, con las áreas de Fomento y Productos de León, la segunda, ligada al área de Cooperación y Servicio de Asistencia a Municipios, SAM, además del área de Cultura, que incluye el Instituto Leonés de Cultura (ILC). En el anterior mandato, UPL rompió el pacto con los socialistas y los incumplimientos que denunciaron sobre el mismo implicaron el veto a Eduardo Morán.
Al acto de constitución de la nueva corporación provincial asistieron el presidente de las Cortes Autonómicas, Carlos Pollán, el consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, Juan Carlos Suárez-Quiñones, el alcalde de León, José Antonio Diez, el general Jefe de la XII Zona de la Guardia Civil en Castilla y León, Luis Antonio del Castillo Ruano, el rector de la Universidad de León, Juan Francisco, García Marín, y parlamentarios de PSOE y PP y el presidente del Consejo Comarcal de El Bierzo, Olegario Ramón, entre otros representantes políticos e institucionales.
Las resoluciones de los recursos presentados en el Ayuntamiento de Villablino y en la capital -que quedó zanjado con anterioridad- han provocado que la de León se convierta en la última diputación de España en constituirse.